La belleza de esta especie es equivalente a su misterio, que por años, exploradores y taxónomos mexicanos y extranjeros estuvieron buscando sin éxito en la mina de Tovar, Durango. Alrededor de 100 años tuvieron que pasar hasta que Julia Etter & Martin Kristen redescubrieran esta especie desde su colecta en 1906 por el Dr. Palmer.

Se propuso por parte de la UNAM para incluirla en la NOM-059-SEMARNAT-2010 por el marcado endemismo, pocos ejemplares, saqueo y el cambio de uso de suelo por actividades mineras en la zona. Desgraciadamente, hoy su población ha sido devastada por estas actividades en la zona donde se conocía (probablemente extinguiéndola). Por ello, la estrategia de conservación fuera de hábitat natural en jardines botánicos, viveros o colecciones privadas logran su preservación y, si es posible, realizando reintroducción por expertos en caso de determinarse extinta en hábitat natural.

Su lento crecimiento, rareza, dificultad y poco cultivo así como la belleza de su floración y color particular de su roseta hacen que sean de las especies favoritas de coleccionistas y cultivadores, adquiriendo una gran responsabilidad al momento de conseguir estos ejemplares para asegurar la sobrevivencia de la especie.

El proyecto de Xerofitia busca darle mayor reconocimiento al valor histórico, ecológico y ornamental que las especies nativas representan, pero que tristemente han ido perdiendo por la introducción de plantas importadas (exóticas), cultivares o híbridos extranjeros y mayor apreciación a variegación o mutaciones. Sin embargo, esta especie es un claro ejemplo de que la belleza que se encuentra de manera natural en nuestro país es muy grande.

Curiosidades
1. Su pariente más cercano es la hermosa 𝘌𝘤𝘩𝘦𝘷𝘦𝘳𝘪𝘢 𝘫𝘶𝘭𝘪𝘢𝘯𝘢 del estado de Sinaloa.
2. El epíteto geográfico debió haber sido 𝘌. 𝘵𝘰𝘷𝘢𝘳𝘦𝘯𝘴𝘪𝘴, se escribió de manera incorrecta con la letra «b» pero actualmente es el aceptado.
3. Originalmente se publicó como 𝘜𝘳𝘣𝘪𝘯𝘪𝘢 𝘭𝘶𝘳𝘪𝘥𝘢 por J. N. Rose en 1911 hasta 1930 que se colocó en el género 𝘌𝘤𝘩𝘦𝘷𝘦𝘳𝘪𝘢 por A. Berger.

Fuentes:
-Etter J., & Kristen, M. (2011). The rediscovery of the elusive 𝘌𝘤𝘩𝘦𝘷𝘦𝘳𝘪𝘢 𝘵𝘰𝘣𝘢𝘳𝘦𝘯𝘴𝘪𝘴.
-Echeverias: Grupo de estudio- Lic. Javier Mera.
-Biól. Jerónimo Reyes Santiago